Microrrelatos 4º E.S.O. A

Los alumnos de 4º E.S.O. (2013-2014) del I.E.S. Cairasco de Figueroa han trabajado este curso las vanguardias. Algunas de las actividades de creación literaria vanguardista trabajadas en clase han sido Poemas Dadaístas, Cadáveres Exquisitos y Microrrelatos. Los alumnos se han implicado mucho en el tema y para el Día del Libro se ha realizado una exposición en el Hall del Instituto y unos Talleres de Creación Literaria impartidos por los propios alumnos a sus compañeros de otros cursos. Aquí les dejó sus creaciones y algunas de las imágenes de sus trabajos y de la exposición.

Sobre ruedas

Aquella mañana cuando se despertó, no podía caminar. En sus pies no había zapatos y sus piernas estaban deformadas en una bicicleta. Sobre su cama había una maleta, la abrió y encontró unos vaqueros en su interior. Se los intentó poner, pero sus piernas retorcidas no se lo permitieron. Pensó que la bicicleta que llevaba en su interior era el medio para llegar lo más lejos que nunca podría haber llegado con unos zapatos.

Alfonso García Mesa

Sergio Franco Medina

Todavía recuerdo…

Todavía recuerdo aquel día que te tuve conmigo por primera vez, cuando te besaba con el mayor cariño del mundo. Parecías tan delicado entre mis brazos que aún me pregunto cómo algo tan pequeño podía llegar a ser tan grande. Recuerdo también que mientras dormías, después del cuento, me encantaba sentir tu aroma, ese que jamás olvidaré…

Lucía Díaz

Carla Quesada

El perfume

Tras sus gafas oscuras y ese perfume característico se escondía el corazón de un chico enamorado de aquella hermosa mujer que noches antes lo había seducido con aquel peculiar vestido. Solo podía pensar en aquel paso firme y su belleza natural, tan natural como lo que él sentía hacia aquella mujer, escondido tras sus gafas oscuras.

Ylenia Rodríguez del Río

Elena Déniz González

La pequeña aventura de Anastasia.

Nuestra pequeña protagonista, Anastasia, ha visto un anuncio en una página web. Un anuncio de un bolso que ella considera que es ideal y está en la tienda que hay a cuatro manzanas de su pequeño piso. A la mañana siguiente decide levantarse temprano de la cama para ser la primera en tener el bolso. Ya que no tiene coche, coge su nueva bicicleta azul y se pone en camino. Al llegar a la tienda, le pregunta a la dependienta por la oferta y la dependienta le responde que ha llegado tarde, que ya estaba agotado. Anastasia deprimida vuelve a coger su bicicleta y se va a la casa arrepintiéndose de no haber llegado a tiempo.

Himar Marrero

Elisabet López

Mi mundo no es el tuyo

En mi mundo de fantasía el camino era largo e intenso. Millones de flores convertidas en relojes, me repetían la hora una y otra vez, una chica cualquiera que dependía del tiempo. La mariposa de diamantes azules era mi guía y compañera en aquel extraño lugar. Estaba asustada y el sonido de aquellas flores retumbaban en mi cabeza, me quedaría en el camino. Pero la mariposa me quió hasta el lago de la valentía, y tras beber de su agua me tendí al descanso en aquella humilde choza que decidió darme sombra para intentar huir un poco de aquel mundo de locos.

Dara Sánchez Medina

Rocío García Díaz

¡VIVE!

Era una vez una joven que lo único que hacía era preocuparse por el tiempo, por cuanto viviría, pero no se daba cuenta de que al estar pensando en eso siempre se estaba olvidando de lo más importante, que es vivir. Ella no solo tenía miedo al tiempo sino al como morir, no conducía pues le daba miedo, no viajaba por miedo…

Un día conoció a un joven de su misma edad pero muy diferente a ella, a él le gustaba vivir la vida. Con el paso del tiempo se hicieron muy buenos amigos y él le enseñó a ella que la vida es algo bueno y que somos y no somos nada en realidad, que debía vivir sin miedo y debía disfrutar cada minuto de sus vida y no pensar en que pasará, pues solo tenemos una vida y hay que disfrutarla.

Kiara Ramos Santana

El collar misterioso

Había una vez un chico llamado James que fue a una tienda a comprar ropa. De repente vio un pantalón que le llamó la atención. Al salir de la tienda, de camino a casa vio a un chico con un sombrero pidiendo limosna, mientras tocaba un gran tambor, y le echó algo de dinero.

Al llegar a casa le regaló a su esposa aquel collar misterioso que se había encontrado lo que no sabía que el collar era de ella.

Álvaro Arencibia Delgado

Jeremy Díaz Olivares

Increíble

Pasaba la noche de acampada en el bosque, cuando decidió alejarse del grupo a observar las estrellas desde un buen lugar. Subió a un árbol y quedó hipnotizada, observó aquellos miles de puntitos brillantes en el oscuro cielo, y la luna, la luna completamente llena. En ese preciso instante decidió que no volvería a la ciudad , que se quedaría allí para siempre, para poder observar cada noche ese alucinante desfile de millones de luces ante sus ojos y sentirse increíble pero a la vez como algo insignificante en un infinito universo.

Gara Castellano Caballero

El misterio del bolso

Érase una vez una chica algo misteriosa para los ojos de los demás, aunque con una vida muy tranquila, hasta que una vez, sin esperarlo, cuando volvía a casa su vida cambió al encontrarse un misterioso bolso que escondía un anillo y un libro algo extraño. Algo miedosa y a la vez curiosa ojeó el libro y descubrió la larga trama que aquel anillo tan extraño escondía desde hacia generaciones.

Alexandra Medina Rodríguez

Elena Montesdeoca Ortega

Cumpleaños al cuadrado

Había una vez un chico llamado Lorenzo que vivía con su madre. Ese día no era un día cualquiera sino un día especial para él ya que era su cumpleaños.

Al llegar del trabajo su mujer Diana le tenía preparada una gran sorpresa. Él se sorprendió al ver allí a toda su familia. Su hijo Diego le regaló un precioso reloj, Él estaba tan contento que lloró de emoción. Ese día lo pasaron muy bien.

Al día siguiente era el cumpleaños de Diego, su hijo, y Lorenzo decidió comprarle una bicicleta. Al llegar a casa todos esperaron sentados en el sillón a llegara Diego del colegio para darle la sorpresa.

Yuncai Chen

Cristina Acosta Santana

Mi Príncipe Azul

Cuando entró aquel hombre tan guapo en aquella exposición de caravanas, supe que tenía que hacer algo para hablarle. Observé que tenía un reloj y decidí preguntarle la hora, me dijo que eran las diez y cinco.

En el momento en que estaba yendo sonrojada por su penetrante mirada, me detuvo y me preguntó cómo me llamaba, sentí que el tiempo se paraba y supe que estaba enamorada. Justo en ese momento una señora que pasaba por nuestro lado nos interrumpió ya que sus gafas se cayeron. Rápidamente, él las recogió y se las entregó a la señora. Y a partir de ese día supe que era el amor de mi vida ya que era simpático, caballeroso…vamos mi Príncipe Azul.

Claudia Acosta García

Delia Ojeda Barrameda

Tras el beso

Había una vez una princesa de s.XXI que como todas las mañanas recoge el pan en la puerta de palacio. Esta vez el pan se encontraba junto a una nota: “Si este pan comerás, suerte tendrás”. Al pegar su primer bocado sus labios se enrojecen y de la nada surgen unas sandalias mágicas donde pone: “con el beso de tu amor verdadero te curarás”.

Ella, ya enamorada de un príncipe, estaba segura de que se curaría con su beso. Sin dudarlo emprendió el camino con las sandalias. Tras una larga ruta llega al palacio real donde se encontraba él. Le cuenta lo ocurrido y sin dudarlo la besa. Entonces aquello desaparece y se dan cuenta de que son el uno para el otro; esa era la suerte que ofrecía la primera nota.

Zuleica Martín Alonso

Sara Vera Rodríguez

Su Príncipe Azul

Érase una vez una niña que vivía en una gran casa con su familia rica. Ella no había vivido su primer amor, hasta que encontró a su príncipe azul, este era también de familia rica. Se empezaron a conocer, pero como en toda historia de amor, siempre sucede alguna cosa no muy bonita. Ella era la niña más feliz del mundo, empiezan a tener “algo” y a la semana su príncipe le dice que la quiere pero que no estaba seguro de estar con ella, la princesita lo comprende pero lo que no entiende es porque le dice que la quiere, después que no… eso fue lo que a ella le dolió porque se llevó una gran desilusión. Sufrió mucho durante dos días, hasta que dijo se acabó y se hizo la fuerte, aunque no lo fuera. Las cosas cambiaron y fueron amigos, pero la esperanza se fue marchitando en la jovencita. Después de todo, ella volvió a sonreir y a ser la niña más feliz.

Sara Santana Herrera